Enseñar para EMPODERAR

La Academia de Formación Laboral de Cemex es una iniciativa social que va más allá del manejo de bulldozers o tractores. Allí se empodera a comunidades e individuos mientras se fortalece la industria de la construcción.

“La Academia nació en el 2021 en respuesta a la escasez de mano de obra capacitada. Agrupamos certificaciones ya existentes, añadimos nuevas y diseñamos un modelo ágil para apoyar a comunidades y fortalecer el sector de la construcción”, explica Jannice Jusino Cruz, la Coordinadora de Impacto Social y Asuntos Corporativos de Cemex, da fe de ello.

Su modelo de participación es inclusivo; abre las puertas a las mujeres que quieren incursionar en la industria, manejando equipos pesados, o que buscan empoderarse para aportar en proyectos comunitarios. También es un espacio solidario con la diversidad de movilidad, brindando posibilidades. Suman 139 certificaciones las que la Academia de Formación Laboral (AFL) ofrece y que han impactado la vida de más de dos millaresde ciudadanos.

OBRA: ¿Qué tipo de certificacio- nes ofrecen y qué habilidades específicas se enseñan?

AFL: Ofrecemos certificaciones en manejo seguro de maquinaria pesada, como montacarga, excavadora, bulldozer, retro excavadora, plataforma elevadora de personal, mini excavadora, mini cargador frontal, skytrak y tractor agrícola. Cada certificación incluye teoría, práctica y examen, con enfoque en seguridad y operación efectiva.

OBRA: ¿Cómo seleccionan a los participantes, y qué criterios utilizan para incluir en el programa a grupos comunitarios?

AFL: Los participantes deben ser mayores de 18 años. Pagan una tarifa nominal de $40 y Cemex cubre el resto como parte de su compromiso social. El programa está alineado con las normas de Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA). Se pretende abrir oportunidades a personas desempleadas o en búsqueda de una segunda oportunidad, incluyendo a mujeres que quieren insertarse en este campo tradicionalmente dominado por hombres.

OBRA: ¿Qué impacto han atestiguado en las comunidades o en la vida profesional de los egresados del programa?

AFL: Muchas personas consiguen empleo poco después de certificarse, o mejoran sus condiciones laborales. También mencionan mayor estabilidad económica y confianza personal. Las certificaciones se ofrecen en Ponce, pero están abiertas a participantes de toda la isla. Han llegado personas de distintas regiones, incluyendo mujeres que buscan crecer profesionalmente en el sector.

"Me interesé en tomar el curso de montacargas porque no quiero crearme limitaciones en aprender otros campos que generalmente son trabajados por hombres, al menos aquí en Puerto Rico."

-Zuleika Cortés, participante

OBRA: En un momento en que la industria enfrenta escasez de mano de obra diestra y limitaciones en fondos de recuperación, ¿cómo aporta la Academia a cerrar esa brecha?

AFL: Formamos talento local con las destrezas más urgentes, de forma ágil y accesible. Cada persona certificada representa una respuesta concreta a la escasez de trabajadores en el sector. Esto permite avanzar los proyectos de reconstrucción con personal capacitado aquí mismo en Puerto Rico.

OBRA: ¿Cómo visualizan el futuro de esta iniciativa y qué planes futuros tienen para expandir o mejorarla?

AFL: Queremos ampliar la oferta con nuevos talleres prácticos, no solo en construcción, sino también en otras industrias. También buscamos fortalecer vínculos con empresas para facilitar empleos, pasantías y redes de apoyo que ayuden a insertar a más personas al mercado laboral.

OBRA: ¿Qué ha significado para Cemex apostar por una iniciativa como ésta y qué aprendizajes se han llevado en el camino?

AFL: La Academia ha sido una evolución natural de nuestro compro- miso con el desarrollo sostenible y la transformación social. Nos ha permitido construir capacidades, dignidad y futuro, acercándonos más que nunca a las comunidades para escuchar, colaborar y generar valor compartido. Hemos confirmado que el talento existe, solo faltaban oportunidades. Las alianzas con el Departamento de la Vivienda, PathStone, gremios, empresas y líderes comunitarios han sido clave para lograrlo. Apostar por las personas es siempre la mejor inversión.

Por Militza Suárez Figueroa, Editora

Fotos cortesía de Cemex